Por: Diana Aristizábal
Estaba segura de mi decisión de estudiar Ingeniería Civil, hasta que un amigo de la familia hablaba con tanto entusiasmo de las torres de energía y de las centrales eléctricas que me contagió. En ese momento, cuando tenía 15 años, decía que no quería estudiar ‘carreras hechas para niñas’, ahora me río y digo, ¿quién dijo que las carreras tenían género? Aunque así a veces lo sentí.
En el primer intento, como les ocurre a miles de personas, no pasé a una de las universidades públicas más reconocidas de este país, pero lo intenté una vez más y resultó. Ahora hacía parte de un grupo de 51 estudiantes en el que solo éramos cinco mujeres, y ahí estaba yo. Firme, convencida y enamorada de la Ingeniería Eléctrica. Sobreviví y llegué a una reconocida empresa de Medellín para hacer mi práctica profesional, que luego se convirtieron en mis primeros cuatro años de experiencia, donde conocí personas que me enseñaron, cuidaron, valoraron, pero otros, en cambio dudaban del talento, de las ganas, del conocimiento.
Hacía trabajo de campo, iba a las subestaciones a hacer levantamientos de los diseños que estábamos desarrollando, y en medio de esas salidas escuché una frase que adoré: “esta niña que va a ser capaz de hacer el trabajo. Se le van a quebrar las uñas y los tacones”. Por eso, traigo a este texto la famosa expresión de la escritora británica, Vivien Greene, “la vida no es esperar a que pase la tormenta, es aprender a bailar bajo la lluvia” … pues en vez de desmotivarme, me impulsó con tanta fuerza que hoy cumplo más de 24 años de servicio con tacones y uñas largas.

Uno de los días más importantes de mi vida profesional fue el momento en el que me llamaron de la Gerencia de Proyectos de Infraestructura de ISA para trabajar como contratista en el proyecto de la UPME 2003, un gran hito para la multilatina, pues reforzarían la Red Central y se conectaría con la región Caribe, gracias a esta experiencia, regresé en el 2012 para formar parte de Ingeniería Corporativa, esta vez desde adentro.
También reafirmo que lo que estudié no es una carrera de hombres ni de mujeres, es de personas, y que desde nuestra sensibilidad aportamos a esta profesión “masculinizada”, pero celebro con orgullo que en ISA las oportunidades son para todos. Para todas.
Hoy me siento feliz. Recientemente lanzamos el Centro de Pruebas de Concepto, un laboratorio digital de alta tecnología, donde se podrán realizar pruebas de control y protecciones de los sistemas eléctricos de alto voltaje con un sistema de simulación en tiempo real, con el propósito de fortalecer calidad y confiabilidad en los sistemas de transmisión de energía, y contribuir a preparar los sistemas para las mayores exigencias de las redes del futuro: más confiables, flexibles, resilientes y seguras. El CPC también permitirá acelerar y enriquecer la curva de aprendizaje y entrenamiento de personas para desarrollar la competencia crítica en estos temas de alto componente y exigencia técnica. Este sueño que comienza está bajo la dirección y liderazgo de Diana Aristizábal, coordinadora de Ingeniería de Subestaciones en ISA. Mucho gusto, soy yo.
9 comentarios en “No es una carrera de hombres ni de mujeres, es de personas”
Amé esta historia. Desmitifica, derrumba barreras. Me encanta saber que sigues en tacones y uñas perfectas. Gracias por compartir.
Felicitaciones Diana, que berraquera
Felicitaciones por tan linda carrera.
Diana que es esa belleza! Me encantó tu texto y ese título está brutal! todos, todos, todos somo solo personas que nos puede gustar una cosa o la otra, realmente me encantó. Y con esa sencillez de tu discurso, de esos que salen del corazón, donde caben todos. Mis felicitaciones Diana y que llegue a muchas generaciones un discurso tan incluyente, hermoso 🙂
Parabéns. Bela história. Orgulho de pertencer ao grupo ISA que valorizam a todos independente de gênero, raça, etnia ou qualquer outro fator.
Diana que es esa belleza! Me encantó tu texto y ese título está brutal! todos, todos, todos somo solo personas que nos puede gustar una cosa o la otra, realmente me encantó. Y con esa sencillez de tu discurso, de esos que salen del corazón, donde todos caben. Mis felicitaciones Diana y que llegue a muchas generaciones un discurso tan incluyente, hermoso 🙂
Felicitaciones en tu coordinación, Las limitaciones viven solo en nuestras mentes y las oportunidades no pasan, las creas
Felicitaciones en tu coordinación, Las limitaciones viven solo en nuestras mentes y las oportunidades no pasan, las creas.
Excelente texto, las capacidades no se limitan por el genero, los limites se colocan cuando no ponemos toda nuestra fuerza y empeño a lo que amamos.
cuando algo nos enamora, no hay obstáculos… se logra! y es así, que sin importar quien eres…. logras todo lo que quieres!