María Fernanda Yepes, Cofundadora de Casa Felina.
Desde los 26 años estuvo entre cámaras de televisión, libretos y grandes escenarios. Hoy su vida se mueve con un propósito superior: contribuir para vivir en un planeta mejor de lo que lo encontramos. ¿Realmente lo necesito? ¿Me hace falta? ¿Es indispensable? Son algunas preguntas que se hace con frecuencia en un mundo, que afirma, es frenéticamente compulsivo por la necesidad de consumo con falta de conciencia. A propósito del Mes del Jaguar, estuvimos en un diálogo inspirador con María Fernanda Yepes, activista de corazón verde a la que los felinos le transformaron la manera de sentir la vida.

💬 ISA: ¿Cómo llegaron los felinos a estar más cerca de María Fernanda Yepes?
María Fernanda: Fue un proceso. Nunca fui amante de los gatos, les tenía miedo y me parecían indescifrables. Con los años tuve la oportunidad de convivir y me fui enamorando de los felinos, entendiendo su comportamiento y a identificarme muy fuerte con ellos. Analizan, filtran y son muy independientes. Eso me gusta.
💬 ISA: ¿Qué tanto sabes de jaguares y biodiversidad?
María Fernanda: El jaguar es absolutamente fundamental en el ámbito ambiental y ancestral. Representa vida, equilibrio, sanidad. En las culturas indígenas es un ser de conocimiento, poderoso, sobresaliente. Desde el punto de vista ecosistémico, su presencia es vital por ser una especie sombrilla, arriba de él no existen otras especies, regula el suelo, protege el agua y los bosques. Poco a poco he ido aprendiendo y descubriendo la importancia del animal más imponente de la selva americana. Nuestro rey de la selva.
💬 ISA: ¿Por qué preocuparse por la suerte del gran felino de América?
María Fernanda: Si hay jaguar, hay vida, pero hoy está calificado como especie casi amenazada. En Uruguay y El Salvador ya se encuentra extinto. Su mayor amenaza es la industrialización, la caza por retaliación, la reducción de su corredor biológico, la ganadería. Es preocupante y necesario protegerlo.
💬 ISA: Hablemos de pasiones. ¿Cómo nace Casa Felina?
María Fernanda: Es un sueño en construcción con mi pareja y nace en medio de la pandemia como consecuencia de un cambio profundo. Estoy rediseñando mi vida. Desde los 26 años comencé en el mundo de la actuación, llegó de manera inesperada, pero recibí esta oportunidad con amor y gratitud por más de 17 años. Sin embargo, desde hace un buen tiempo vengo desacelerando los pasos, a los seres humanos nos enseñaron que todo el tiempo hay que hacer, hay que producir y vivir en frenetismo. Pero es tiempo de parar, de hacer cosas distintas.
💬 ISA: ¿De qué manera concibes la vida ahora y cómo se relaciona con Casa Felina?
María Fernanda: Parar es muy difícil, nos cuesta entrar en estado de contemplación, que es precisamente lo que nos enseña la naturaleza. Medimos el éxito por la cantidad de trabajo que tenemos y por la cantidad de dinero que ganamos. Y tal vez el dinero nos está llevando a la destrucción, con esa necesidad de querer más, de poseer más, de extendernos más, de dar todo el tiempo más. Pero definitivamente hay que aprender también a recibir desde adentro, para darse calma, espacio, tiempo, paz y eso es lo que estoy haciendo. Y eso es Casa Felina, donde entendí la necesidad de volver a lo esencial. Los seres humanos necesitamos encontrar la ruta y el mapa porque nos perdimos. Es fundamental recuperar nuestras tradiciones.
💬 ISA: ¿Qué es Casa Felina y cuáles son las grandes apuestas de este proyecto?
María Fernanda: Con Casa Felina buscamos proteger un territorio como centro de desarrollo de la conciencia a todo nivel: desarrollo humano, de la mente, del ser y el hacer pero con conciencia. Queremos que sea en la Sierra Nevada de Santa Marta, declarada nuevo patrimonio de la humanidad por la Unesco y donde encontramos total coherencia. En eso estamos trabajando y que más adelante, también pueda convertirse en una gran biblioteca digital de saberes. Nuestro símbolo es el jaguar y nuestro principal compromiso es protegerlo a él y su biodiversidad asociada. Aquí compartimos un propósito con ISA y eso nos emociona.
💬 ISA: ¿Por qué hablas de cultivar una cultura de paz?
María Fernanda: La naturaleza nos trae calma, tranquilidad, pero no sabemos convivir con ella porque estamos siempre en estado de carencia, creemos que nunca es suficiente. Entonces la exprimimos sin piedad. Cuando aprendamos a vivir en equilibrio, viviremos una cultura de paz.

💬 ISA: ¿Cómo debería ser nuestra relación con la naturaleza? Un mensaje final.
María Fernanda: ¿Cuándo le vamos a devolver a la naturaleza un poco de lo mucho que nos ha dado? Esa es la pregunta urgente que hay que hacerse porque ya no tenemos tiempo, vienen futuras generaciones y qué planeta les vamos a dejar… El momento de actuar es ahora.
3 comentarios en “Los felinos transformaron mi vida”
Qué bueno conocer este lado de l@s artistas. Muy buena entrada 👌🏻🤩
Una vida inspiradora compartiendo nuestra Jaguaridad en Latinoamérica
Buena tarde, me gustaría hacer un trabajo similar para la recuperación de venados que han sido perseguidos por decadas en una zona del departemento de Nariño, agradecería un apoyo conjunto en este propósito